¿En qué se diferencian un queso curado y uno madurado?
En una fábrica de quesos artesanales hay lugar para diferentes tipos de quesos, uno de los productos más sabrosos de nuestra gastronomía. Sin embargo, para muchos hay dudas a la hora de conocer las diferencias entre un queso curado y uno madurado.
Los quesos frescos son aquellos que están listos para ser consumidos poco después ser producidos, ya que tienen que estar curándose durante un máximo de 7 días si pesan más de 1,5 kg. Siempre deben guardarse en la nevera, preferiblemente en un recipiente hermético. Algunos de los más populares son el queso de Burgos o la mozzarella.
Los quesos madurados, por su parte, son aquellos que requieren un proceso de duración que se sitúa entre 105 y 270 días. Si pesan más de 1,5 kg, necesitan un mínimo de cuatro meses para estar listos para comer. En función de lo largo que sea el periodo se pueden diferenciar al mismo tiempo en curados, viejos y añejos. Una fábrica de quesos artesanales puede elaborar diferentes tipos de quesos.
Además, hay que mencionar los quesos semicurados, una variedad que está entremedias a las dos anteriores. Para llegar a su punto idóneo necesita un total de 35 días de curación si pesa más de 1,5 kg. La diferencia, entre estos, depende del tiempo de curación.
Quesos frescos, madurados y semicurados
En primer lugar, hay que considerar que se pueden agrupar los quesos en frescos o madurados en función del tiempo que estén curándose en los secaderos. Cuánto más tiempo de curación tenga, el queso será más intenso y graso.Los quesos frescos son aquellos que están listos para ser consumidos poco después ser producidos, ya que tienen que estar curándose durante un máximo de 7 días si pesan más de 1,5 kg. Siempre deben guardarse en la nevera, preferiblemente en un recipiente hermético. Algunos de los más populares son el queso de Burgos o la mozzarella.
Los quesos madurados, por su parte, son aquellos que requieren un proceso de duración que se sitúa entre 105 y 270 días. Si pesan más de 1,5 kg, necesitan un mínimo de cuatro meses para estar listos para comer. En función de lo largo que sea el periodo se pueden diferenciar al mismo tiempo en curados, viejos y añejos. Una fábrica de quesos artesanales puede elaborar diferentes tipos de quesos.
Además, hay que mencionar los quesos semicurados, una variedad que está entremedias a las dos anteriores. Para llegar a su punto idóneo necesita un total de 35 días de curación si pesa más de 1,5 kg. La diferencia, entre estos, depende del tiempo de curación.